LOS ÚLTIMOS DÍAS

CAPÍTULO 10: LA PRIMERA VENIDA DE JESÚS Muchos de los incidentes en la primera venida del Señor Jesús están destinados a señalarnos hacia adelante a los acontecimientos que sucederán en su segunda venida. Así Zech. 9: 9-11 habla del Señor Jesús que viene a Sion con salvación, estableciendo su Reino y resucitando a los muertos. Esto es todo acerca de su segunda venida, pero la idea de que él venga a Jerusalén con la salvación es obviamente aplicable a su entrada triunfal en la última semana de su ministerio (Mt. 21: 5). Hay indicación clara en los registros de Lucas 1 y 2 de que había un remanente fiel en Jerusalén en el momento del nacimiento de nuestro Señor, cuya actitud apunta hacia la del remanente de los últimos días en el momento de su segunda venida. Aunque sólo se mencionan a Zacarías, Isabel, Simeón y Ana, podemos estar seguros de que había otros en este grupo -Anna "habló de él a todos los que buscaban la redención en Jerusalén" (Lucas 2:38); "muchos" se regocijaron incluso en el nacimiento de Juan, en el entendimiento de que él era precursor de Cristo (Lucas 1:14 - a menos que el "muchos" se refiere a los ángeles?). Es posible que los pastores estuvieran también en este grupo, lo que confirmaría la impresión de que el "remanente" estaba en las filas inferiores de la sociedad - Zacarías, un sacerdote superannuado, Ana, sirviente del templo (Lucas 2:37) el equivalente a un limpiador de oficina del siglo XX. Hay mucho lenguaje usado con respecto al nacimiento de Jesús que es fácilmente aplicable a Su segunda venida. Esto por sí mismo nos anima a ver el registro de aquellos que esperan su primera venida como típicos de los últimos días. El nacimiento de Juan y Jesús es descrito como Dios "visitando y redimiendo a su pueblo" (Lucas 1:68); ¿qué mejor manera de describir la intervención de Dios en los últimos días? "El resplandor del cielo nos ha visitado" (Lucas 1:78 AV mg.) Fue el comentario de Zacarías sobre el propósito de Dios en Juan y Jesús, haciendo una alusión inconfundible a Mal. 4: 2 acerca de la segunda venida de Cristo como el sol naciente. Los ángeles se regocijaron de que a través del nacimiento de Cristo hubo "Gloria a Dios en las alturas, y paz en la tierra, buena voluntad para con los hombres" (Lucas 2:14), aunque esto sólo se hará plenamente en el Reino. Simeón habló del niño Jesús como "una luz para aligerar a los gentiles, y la gloria de tu pueblo Israel" (Lucas 2:32), aunque esto sólo será plenamente cierto después de la segunda venida (Isaías 42: 6 y 49: 6). El remanente "buscó la redención (aparecer) en Jerusalén" (Lucas 2:38); sólo podrían haber deducido esto de darse cuenta de que las profecías del "reino" del Antiguo Testamento relativas a Jerusalén, que normalmente asociamos con la segunda venida, Juan el Bautista comentó que predicaba el arrepentimiento y bautizaba en Israel, para que el Mesías se manifestara a Israel (Juan 1:31). Su obra fue un patrón para el ministerio de Elías de los últimos días. Podría argumentarse que el Mesías sólo se manifestó en el primer siglo a causa del éxito de la obra de Juan, pues muchos fueron bautizados por él. ¿Podría ser que el momento de la revelación final del Mesías también depende del éxito del ministerio de Elías al llevar a Israel al arrepentimiento? Y qué implicaciones hay en esto, si realmente somos la voz de ese ministerio ... Ahora podemos escanear el registro para una tipología posterior más detallada: - - El remanente estaba en o alrededor de Jerusalén - como parece ser también el fiel de los últimos días. Ellos buscaron que el Mesías apareciera en Jerusalén (Lucas 2:38). Si los judíos de los últimos tiempos son perseguidos hasta el punto de que los únicos judíos que quedaron vivos en la tierra están en Jerusalén (véanse los estudios anteriores, especialmente el capítulo 8), entonces ellos también esperarán que el Mesías venga a ellos en esa misma ciudad. Tenga en cuenta que la mujer cuyas intensas súplicas representan las oraciones del remanente del último día (Lc. 18: 2-8) "estaba en una ciudad" - Jerusalén? - Ellos esperaban ansiosamente el nacimiento del Señor como un cumplimiento de las promesas abrahámicas, que a través de su simiente "que siendo liberados de la mano de nuestros enemigos, podamos servir a Dios sin temor" (Lucas 1:74). De la misma manera, el remanente de los últimos días meditará cómo las promesas abrahámicas relativas a la libertad de sus enemigos (árabes) son tan relevantes para ellos -quizás debido al ministerio de Elías volteando sus corazones a los "padres" judíos, una frase usada frecuentemente sobre los patriarcas que recibió las promesas (Mal. 4: 6). - Israel en el primer siglo estuvo bajo el dominio de Roma, la cuarta bestia de Dan. 7:23. En la aplicación de estos últimos días, requerida por la imagen sobre la que se basan las bestias que se mantiene completa en los últimos días, la cuarta bestia con sus cuernos corresponde a la coalición árabe que entonces dominará a Israel. - Algunos de los remanentes tenían el don de profecía del Espíritu (Lucas 1: 41,67; 2: 26,36). El remanente de los últimos días también puede experimentar esto - sus ancianos (cp Zacarías y Simeón) y los jóvenes (cp. María), pueden tener el don de profecía alrededor del tiempo del regreso del Señor - "antes del gran y terrible día de Jehová venga "(Joel 2: 28-31). - Los pastores que observan en la noche mientras el Señor nació (Lucas 2: 8) se hace eco de la Pascua. Hay buenas razones para pensar que la segunda venida puede estar asociada con el tiempo de la Pascua (ver 'Pascua y Éxodo' anteriormente). La visión de los ángeles que vieron puede corresponder al remanente de Jerusalén, viendo un "signo literal del hijo del hombre en el cielo (literal)" (Mateo 24:30), compuesto por los ángeles querubines. Esta "señal del hijo del hombre en el cielo" debe hacer alusión al literal presagio que los pastores vieron en el cielo, señalando la primera venida del Señor. Por lo tanto, no habrá necesidad de decir "Vea aquí, o vea allí" - Zacarías y Isabel "eran justos delante de Dios" (Lucas 1: 6) en medio de un mundo judío corrupto que se negaba a prepararse para la manifestación de Dios en Cristo, a pesar de la disponibilidad de la Palabra de Dios que claramente la profetizó. Esto recuerda la descripción de Noé como "justo delante de Dios" (Génesis 7: 1) en el contexto del diluvio que viene sobre el mundo. Hemos demostrado anteriormente que esto estaba lleno de referencia a los últimos días. - Hay un triple énfasis en que Israel ora a Dios en el camino hacia el nacimiento de Cristo (Lucas 1: 10,13; 2:37). Hemos visto en Joel 2:17 y muchos otros pasajes que el remanente también se dedicará a la oración en los últimos días, como lo hará el Israel espiritual. - La aparición de los ángeles antes del nacimiento de Cristo (Lucas 1: 12,26) es similar a su visita a Israel bajo persecución durante los tiempos de los Jueces, trayendo la noticia de la liberación de sus enemigos árabes a través de un "salvador" . - La concepción de Juan (el profeta Elijah del primer siglo) precedió a la de Cristo - él fue precursor de Cristo - por lo tanto, es necesario que este tipo se cumpla en la venida literal de los últimos días Elías como un preludio a Cristo manifestación a Israel. - El "gozo y la alegría" (Lucas 1:14) del remanente en el nacimiento de Cristo no será más que un oscuro anticipo del éxtasis que el remanente atribulado de los últimos días experimentará en el regreso de su Señor.

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